1500 referentes de la cultura y la política expresaron su adhesión al paro del 24
Desde Juan Grabois hasta Máximo Kirchner, pasando por Axel Kicillof, Hugo Godoy, Pablo Moyano, Adolfo Pérez Esquivel, Cecilia Roth y Charo López suscribieron a un documento que manifiesta un rechazo tajante a la ley Ómnibus. La califican como una “reforma constitucional de facto”.
Redacción Canal Abierto | Mientras la oposición “light”, conformada por la UCR, Hacemos coalición Federal de Miguel Ángel Pichetto y el PRO, avanza con las negociaciones con La Libertad Avanza para darle luz a un dictamen y llevar la Ley Ómnibus al recinto la semana que viene, el bloque de dirigentes y organizaciones sociales, sindicales y políticas que plantean un rechazo tajante al megapaquete de leyes también se consolida y suma adhesiones.
Ayer, dieron a conocer un documento titulado “Más de 1500 personalidades de la cultura, la ciencia, la política y el sindicalismo rechazan la Ley Ómnibus y el DNU de Milei”. La iniciativa encabezada por Juan Grabois ya cosechó las firmas de los gobernadores Axel Kicillof (PBA) y Ricardo Quintela (La Rioja), de los titulares de las tres centrales sindicales y de la UTEP. También recoge adhesiones de otros ex funcionarios e intendentes, y de sectores otrora distanciados dentro del peronismo como Máximo Kirchner, Martín Guzmán, Victoria Tolosa Paz y Santiago Cafiero, entre otros.
En el texto piden la derogación del megadecreto 70/2023, el rechazo a la Ley Ómnibus por ser “una reforma constitucional de facto” y la recomposición de haberes, y convocan al paro y movilización del miércoles 24 que ya tiene fecha y hora: 13hs en el Congreso.
“Pretende destruir en vez de reparar”
El documento, que también suma adhesiones de personalidades de la cultura como Charo López, Cecilia Roth, Dolores Fonzi, Esteban Lamothe o Felipe Pigna denuncia un contexto de “prepotencia institucional y crueldad social”, signado por: el megadecreto 70/2023, el protocolo antiprotestas de Bullrich, al que caracterizan como “autoritario, de restricción de la libertad de reunión, asociación y manifestación”, y la devaluación del 118%, que duplicó la tasa de inflación.
Y cuestiona que, en ese marco, “el poder ejecutivo pretende aprobar un proyecto de ley de casi mil artículos que encubren una reforma constitucional de facto y el establecimiento de unas supuestas “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos”, con un evidente objetivo de mejorar el lucro de las corporaciones, los organismos internacionales de crédito y el 1% más rico de la sociedad”. “La aprobación de este proyecto sería la culminación de un desguace del Estado social de derecho que, bajo la excusa de su mal funcionamiento actual, se pretende destruir en vez de reparar”, sostiene.
El escrito también rechaza el tratamiento exprés que se le está dando al paquete legislativo, y denuncia que es parte de una “estrategia perversa”, que a propósito deja relegada la discusión sobre el mega DNU, que junto a la devaluación, ya están produciendo “efectos jurídicos que dañan al país en el corto, mediano y largo plazo”.
“Ambos instrumentos no hacen más que empujar a la Argentina en lo que podríamos denominar “las tres flexibilizaciones”: flexibilización laboral, flexibilización impositiva, y flexibilización de las normas ambientales, poniendo al país con el hocico para abajo y así poder extraer a costa del salario de los trabajadores, de los ingresos del Estado y nuestros recursos naturales y estratégicos”, expresa.
En concreto, el documento exige:
1-La derogación del DNU 70/2023 en su conjunto;
2- El rechazo de la megaley en su conjunto;
3- La anulación de cualquier medida que atente contra los derechos y libertades democráticas;
4- La compensación de la pérdida del poder adquisitivo de los ingresos sociales mediante los mecanismos adecuados a cada sector (indexaciones, paritarias, políticas sociales).
Y manifiesta su apoyo a la medida de fuerza convocada por la CGT y las dos CTA. “Como ciudadanos y ciudadanas que creemos en una Argentina justa, soberana, independiente, plural, democrática y humana nos oponemos tajantemente a este atropello contra el Pueblo y con la Constitución en la mano lucharemos para evitarlo, comenzando con la participación activa en la jornada nacional de protesta del miércoles 24 de enero”, concluye.
“Ha errado el rumbo”
Otro de los personajes que en las últimas horas sumó su adhesión al paro y movilización del 24 de enero es Luis Barrionuevo. Así, pese a que durante la campaña apoyó a Javier Milei, ahora el dirigente se vio obligado a pegar un volantazo ante el duro golpe que significan las medidas del Gobierno a sus bases y a la organización sindical en general.
“Creo que está totalmente equivocado y tendrá que revertirlo. No le auguro ni en el Congreso ni en la Justicia que vaya a tener éxito, de la manera que ha venido a querer llevarnos a todos por delante”, dijo el sindicalista en una conferencia de prensa en Mar del Plata.