Ni la derrota ni las demoras para ingresar pudieron opacar la fiesta del pueblo aurinegro
Alrededor de 10.000 hinchas de Almirante viajaron hasta Mendoza para alentar a la Fragata en el partido histórico ante Boca. Varios tardaron para entrar ya que los micros en que se trasladaban fueron retenidos hasta cerca del horario de comienzo del partido. Pese al resultado adverso, la hinchada del Mirasol se hizo escuchar y alentó todo el encuentro.
Hay partidos que no solo se juegan dentro del campo de juego. Y el que disputó Almirante Brown este miércoles, ante Boca, fue uno de ellos. Así lo pensaron y lo vivieron los hinchas aurinegros, que pese a la derrota en la cancha se sintieron ganadores en la tribuna, en lo que fue el primer duelo oficial ante Boca Juniors, lo que obliga a calificar a este encuentro como “histórico”.
El hecho de haber tenido que trasladarse más de mil kilómetros para llegar a Mendoza también le aporta un plus épico. Porque el pueblo aurinegro, pese a un contexto económico muy adverso, se las arregló para volver a demostrar su enorme capacidad de movilización, como ya lo había exhibido en Córdoba, en la final por el ascenso ante Independiente Rivadavia, y en Santa Fe, en los 32avos de final de la Copa Argentina ante San Martín de Tucumán.
Llegar al Malvinas Argentinas, además, para muchos fue una odisea. Porque el operativo policial retuvo en el ingreso a Mendoza a varios de los sesenta micros que salieron de distintos barrios de La Matanza, lo que generó que muchos hinchas ingresaran con el partido ya empezado.
Una vez que se completó la popular con los más de 10.000 simpatizantes aurinegros, todo fue una fiesta que ni la derrota pudo opacar. Porque en las tribunas, y ante Boca, Almirante demostró que tiene una hinchada de Primera.
El regreso de los hinchas a La Matanza y alrededores fue una mezcla de sensaciones. Porque hubo tristeza por la derrota. Pero también orgullo y satisfacción por haber demostrado, una vez más, que la hinchada de Almirante es de Primera. Y que, pese al mal momento que atraviesa el equipo en el torneo de la Primera Nacional, todos piensan: “Ya nos falta poco, ya vamos a llegar”.