Después de muchos años de haber brindado servicio como personal civil en el Ejército Argentino en el área de sistemas, Curotto se había jubilado y decidió emprender en un negocio familiar al que le dedicaba varias horas del día.

También, tenía otro hobby: pescar. Le gustaba irse a las Toninas y soñaba con emprender una nueva vida en la provincia de Córdoba. Sin embargo, delincuentes cambiaron su destino y frustraron sus sueños: el 15 de agosto le efectuaron varios disparos en el afán por sustraerle sus pertenencias.

Según informaron fuentes policiales, los asaltantes se acercaron en un vehículo Citroën rojo. Al frenar la marcha, descendieron del rodado y comenzaron a disparar hacia donde se encontraba el vecino. Tras herirlo, se dieron a la fuga.

Curotto debió ser trasladado de urgencia al Hospital Balestrini, desde donde informaron que ingresó al nosocomio sin signos de vida. Luego de ser revisado, integrantes de la Policía Científica constataron que contaba con tres impactos de arma de fuego en el estómago y en una de sus piernas.

En la escena del crimen, los investigadores secuestraron un bolso, un revólver 22 largo, que analizan si se trataba de un «arma de defensa» con la que contaba la víctima, y dos vainas servidas de nueve milímetros.

El recuerdo de Daniel

Amigos de la víctima lamentaron la muerte de Curotto. En diálogo con El1, Carlos, un amigo de la víctima, había manifestado luego del asesinato: “Me gustaría poder cruzar algunas palabras con él nuevamente, pero es tarde. Fue muy triste enterarme de su muerte”. En esta línea, agregó que genera “temor” la forma en que estos episodios ocurren y cómo la sociedad los naturaliza.

Por otro lado, Walter, otro de sus excompañeros del ámbito militar, expresó: “Nos cruzamos en 1997, él era personal civil del Ejército, teníamos muchas horas de guardia juntos y compartíamos mates, anécdotas, charlas y chistes. Era lo que se conoce como un ‘loco lindo’. Después, yo cambié de lugar y nos reencontramos vía Facebook. Pedimos justicia por su muerte”.

Vecinos cansados de la inseguridad

A días del crimen de Curotto, frentistas de Ciudad Celina se manifestaron en la vía pública y cortaron la circulación de dos carriles de la Autopista Teniente General Pablo Riccheri para reclamar mayor presencia policial ante una escalada de hechos violentos en la localidad.

En diálogo con El1, Maite, una vecina que participó del reclamo, señaló: “Estamos cansados de la inseguridad, los robos son todos los días. Sufrimos un total abandono por parte de nuestras autoridades y de la Policía. La inseguridad y los hechos violentos empeoraron este último año”.

Del reclamo también participaron vecinos de los barrios aledaños de la Ciudad de Buenos Aires y de la localidad de Ciudad Madero. Por otra parte, en el lugar se presentaron efectivos de la Policía, Policía de la CABA y Gendarmería para controlar la situación del tránsito y los manifestantes.