Ariel Lijo, el dormilón

Redacción Canal Abierto | Ante la falta de espacios que permitan la participación de la ciudadanía en el proceso de designación de los cargos vacantes en la Corte Suprema de Justicia de la Nación para los que el Poder Ejecutivo propuso al juez Ariel Lijo y al abogado Manuel García-Mansilla, organizaciones de la sociedad civil realizaron el 22 de agosto una audiencia pública ciudadana en la Cámara de Diputados para expresar impugnaciones y observaciones sobre estos candidatos.

El evento convocado por ACIJ (Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia), Amnistía Internacional, CELS, ELA, INECIP, Poder Ciudadano y Human Rights Watch, contó con la adhesión de numerosas organizaciones civiles especializadas en justicia, derechos humanos, feministas y académicas.

La audiencia a la que asistieron legisladores nacionales contó con tres paneles. El primero sobre Igualdad de género en la composición de la Corte, con la participación de Mariela Galeazzi (Amnistía Internacional), Laura Clérico (Programa Género y Derecho de la UBA), María Eugenia Chapero (Red Mujeres para la Justicia) y la periodista Ingrid Beck. El segundo, sobre las objeciones a la candidatura de Lijo contó con Julián Alfie (INECIP), Celeste Fernández (ACIJ), Karina Kalpschtrej (Poder Ciudadano) y los periodistas Diego Genoud y Candela Ini. El tercero, se centró en García-Mancilla y sus visiones restrictivas en temas de género y derechos humanos. De este, participaron Natalia Gherardi (ELA), Claudio Boada (Unión de Usuarios y Consumidores), Mariela Puga (CONICET-UNC) y la periodista Mariana Iglesias.

El sueño de los ¿justos?

Es de uso popular la frase “dormir el sueño de los justos”, en referencia a aquel que descansa tranquilo, sin remordimientos ni preocupaciones, satisfecho del deber cumplido. Referencias bíblicas hablan del “limbo de los justos”, el lugar donde reposan después de morir “los buenos”, hasta que se produzca la Redención y las almas buenas pasen al Reino de los Cielos.

Una de las posibles “fortalezas” de la candidatura del juez Lijo -actualmente a cargo del Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Criminal y Correccional Federal Nº 4- quizá sea su capacidad somnífera. En su juzgado las causas duermen, cajoneadas por más tiempo de acuerdo a cuán cerca del poder institucional o fáctico estén los implicados.

“Si se realizara el informe estadístico de desempeño que el Consejo de la Magistratura exige a cualquier magistrado que concursa para otro cargo, el resultado indicaría que Lijo es el juez de primera instancia más ineficaz de toda la Justicia Federal Criminal y Correccional de Capital Federal (“Comodoro Py”), un fuero ya de por sí señalado por su mal funcionamiento”, explica un informe presentado por el Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP) en el que se resumen las objeciones a la candidatura del magistrado.

También te puede interesar: “Estadísticamente es el juez más ineficaz de todo Comodoro Py”, sostuvo en una entrevista en Canal Abierto Julián Alfie, director ejecutivo de la ONG.

Otra estadística que destaca el INECIP es que es el juez con mayor demora en causas de corrupción de todo el fuero federal.

Según la “Auditoría de Relevamiento de Causas de Corrupción 1996-2016” realizada por el Cuerpo de Auditores del Consejo de la Magistratura de la Nación en 2016, el juzgado de Lijo es el que tiene una mayor tasa de demoras en causas de corrupción. “El Juzgado Nº 4, a cargo de Ariel Lijo, es el que tuvo más expedientes con 6 o más años de duración en casos de corrupción. Ya sea por ineficiencia o, como señalan algunas denuncias del Consejo de la Magistratura, por un uso político de los tiempos judiciales, esas demoras sistemáticas en casos graves resultan inaceptables para un candidato al máximo tribunal”, destaca el INECIP.

Los “justos” dormilones

Desde 2017, Ariel Lijo instruye la causa penal conocida como “Correo Argentino” que lleva la carátula: “Macri, Mauricio y otros s/ defraudación por administración fraudulenta y cohecho”.

Hace más de siete años que el expediente en el que están imputados el expresidente y otros funcionarios por los delitos de administración fraudulenta, tráfico de influencias y negociaciones incompatibles con la función pública descansa en los cajones del magistrado. La maniobra que investiga el proceso penal es la condonación de la deuda millonaria del grupo Macri con el Estado en concepto del pago de canones por la administración y explotación del Correo Argentino privatizado por Carlos Menem en 1997.

En esta causa, fuentes periodísticas señalan la participación del operador judicial y expresidente de Boca Daniel Angelici, y el exjefe de los espías y amigo de Macri Gustavo Arribas, que “durmieron” al juez haciendo la vista gorda con la causa de enriquecimiento ilícito contra su hermano Alfredo, sobreseído en 2021 por otro campeón de la justicia, Julián Ercolini.

Otra causa somnolienta es la conocida como “YPF”. En esta se investiga el papel de la familia Eskenazi en la adquisición de la petrolera.

Está abierta desde 2008 y lleva 16 años prácticamente inmovilizada. En septiembre del 2023, el juzgado envió un exhorto a la justicia española para averiguar si el grupo Eskenazi se había quedado con algún derecho litigioso en la quiebra de sus subsidiarias que poseían el 25 por ciento de las acciones de YPF-Repsol. Ese fue el último movimiento en la causa, luego de mucho tiempo juntando polvo. El caso sigue sin resolución.

El “caso Siemens”, de 1998, investigaba las presuntas coimas del conglomerado alemán al ex ministro Carlos Corach y otros exfuncionarios de Menem, para hacerse con la licitación pública para la impresión de los nuevos DNI.

Desde 2004 está cargo de Lijo, quien  la archivó en 2019, 15 años después de haber asumido la investigación.

Ese mismo año, Corach aprovechó un blanqueo fiscal para “lavar” 16 millones de dólares. La PROCELAC le advirtió a Lijo que había indicios para relacionar ese dinero con los sobornos del Caso Siemens, pero el juez desestimó la indicación de la procuraduría. En 2008, ejecutivos de la empresa alemana habían entregado como prueba ante la fiscalía de Munich una nota manuscrita que indicaba los montos y los receptores de los retornos: “CM», con US$ 16 millones; «CC» y «HF» (Hugo Franco, entonces Director Nacional de Migraciones), con US$ 9,75 millones cada uno, y «CS» (presumiblemente Carlos Sergi, directivo de la filial argentina de Siemens, quien pasó un tiempo de prisión domiciliaria en su piso 40 de la Torre Le Parc, en Palermo), con US$ 7,5 millones​.

Finalmente, en septiembre de 2023, la Corte Suprema ratificó el archivo de la causa decidido por Lijo y clausuró la imputación a los funcionarios menemistas y cerró el camino que podía implicar nuevamente al grupo Macri en negocios reñidos con la ley.

Un último ejemplo: Edmundo Ruckauf, quien fuera presidente de la Obra Social para el personal del Ministerio de Economía (O.S.M.E.) y primo del exgobernador de Buenos Aires, Carlos Ruckauf:

Fue procesado por administración infiel y fraude en perjuicio de la administración pública. En la causa, abierta en 2007, se investiga la falsificación de expedientes presentados en la Administración de Programas Especiales (A.P.E.) con el fin de recibir subsidios para la compra de medicamentos destinados a afiliados que no padecían las enfermedades descriptas. El estado del procedimiento figura como “Auto de procesamiento sin prisión preventiva”.

Idoneidad y sueño

Finalmente, el INECIP sostiene que “las “demoras” en la resolución de casos de alto impacto institucional ponen en duda, mínimamente, su idoneidad como juez, además de generar suspicacias sobre otras posibles razones de este déficit”.

En el 2004, Lijo fue designado como Juez Federal sin que haya vuelto a concursar para otro cargo en los últimos 20 años. Cabe recordar al Poder Ejecutivo y a los senadores que, si su candidatura es aprobada, estará en la Corte hasta el año 2043.