El acto protocolar tuvo lugar en la sede del establecimiento, sito en la calle French 127. Durante la actividad se colocó la flamante placa con la nueva designación.

La elección fue el fruto de un conjunto de propuestas elaboradas previamente y votadas democráticamente por la comunidad. Entre ellas estaban los nombres de Mariano Moreno, Juana Azurduy, Eva Perón y la mencionada Falcone.

“El nombre Claudia Falcone nos representa como escuela porque defendemos la educación pública y no cualquier educación, una que enseña a pensar y no a obedecer”, destacó Vanina Rojas, docente del CENS N° 485, en una nota con El1.

“En este contexto de discurso negacionista que además atenta contra los derechos de los jóvenes, de los trabajadores, jubilados, mujeres y diversidades, este es nuestro espacio también de resistencia. Seguimos luchando por juicio y castigo. 30.000 presentes. Nunca más.”, enfatizó la profesora.

El CENS N° 485 y su trabajo para «recomponer la desigualdad»

En la misma línea se expresó otro docente, Marcelo De Gastaldi. “Los docentes de esta escuela, de nuestro CENS Claudia Falcone, nos comprometimos y comprometemos con la realidad, para cambiarla. Trabajamos para construir una historia y un presente para todos, un presente en comunión, un presente en paz, un presente que nos grita que hay futuro y que parar eso hacemos educación, una educación, la educación de adultos, que llega para recomponer la desigualdad”.

“Esta escuela, nuestra escuela cumple seis años. Hasta hoy era un número, el CENS 485, un número que dice, pero no dice mucho. Hoy tiene un nombre, un nombre que además nos dice como vemos la educación, una educación que forma y transforma. Una educación que construye una, cien, miles de Claudia Falcone”, cerró con énfasis.

Claudia Falcone: memoria de una estudiante comprometida

María Claudia «Nucha» Falcone nació en La Plata el 16 de agosto de 1960. Fue una de las estudiantes secundarias que, habiendo militado por el derecho al uso del boleto escolar en la Unión de Estudiantes Secundarios (UES), fue secuestrada y desaparecida el 16 de septiembre de 1976 en “La Noche de los Lápices”, durante la última dictadura cívico-militar.

La joven fue trasladada a un centro clandestino de detención llamado Pozo de Arana (o Destacamento de Arana) ubicado en calle 137 esquina 640, La Plata. El 23 de septiembre la trasladaron a otro centro clandestino: el Pozo de Banfield (sito en la Brigada de Investigaciones de Banfield) ubicado en las calles Siciliano y Vernet. Se supone que Claudia Falcone fue asesinada en enero de 1977.

“Todos los días nos quieren silenciar y todos los días decimos que los lápices siguen escribiendo, que los lápices escriben lo que queremos: un país para todos, una nación de pie, un pueblo que no se arrodille, que reclame por lo que le corresponde, que exija lo que es justo, una comunidad que pelee por todos y no solo por un grupito de trasnochados que nos quiere hacer creer que todo lo malo es bueno. Los monstruos de ayer que torturaban y mataban, son los monstruos que hoy anteponen los números a las personas”, finalizaron desde el CENS N° 485.