En primera persona: “Que no digan que Gaza guardó silencio”
Mientras intenta salir de la Franja, donde según reporta la ONU, una de cada tres personas no comen por días y días, la escritora palestina Alaa Alqaisi cuenta los efectos del hambre. Escribe –dice- “antes de que mi lenguaje me abandone por completo”. ¿Dónde leer el texto completo?

Redacción Canal Abierto | Este martes, Revista Anfibia, la publicación de la Universidad Nacional de San Martin que dirige Cristian Alarcón, publicó un ensayo de la escritora palestina Alaa Alqaisi, en el que cuenta desde la Franja de Gaza los efectos de la hambruna en el cuerpo, en el lenguaje y en su país.
“Mucho antes de reclamar el cuerpo, el hambre afloja los andamios del lenguaje. Borra la claridad, desmantela el ritmo y deja atrás los escombros frágiles del pensamiento. Lo que comienza como un párrafo coherente, pronto se disuelve en fragmentos”, dice Alqaisi desde un territorio asediado desde hace casi dos años. Primero, por los bombardeos y las matanzas de las Fuerzas de Defensa Israelíes que ya dejaron más de 60.000 víctimas, y luego, por una hambruna que ya causa desnutrición en al menos el 16,5% de los niños y niñas.
“Según una alerta de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria (IPC) emitida este martes –informa Naciones Unidas en un comunicado del 29 de julio– en Gaza se han alcanzado dos de los tres umbrales de hambruna: la caída en picado del consumo de alimentos y la malnutrición aguda”. El tercero, advierten, es un riesgo certero: “Si no se actúa ahora, se producirán muertes generalizadas en gran parte de la Franja”.
Leé completo “El aullido del hambre”, en Revista Anfibia
Por eso, mientras intenta dejar la Franja, la también traductora escribe “antes de que mi lenguaje me abandone por completo”. “No tanto para ser entendida, sino para permanecer trazable, para dejar atrás la forma del pensamiento, antes de que se escabulla hacia el silencio”. Escribe –insiste –para dejar registro de que “estuvimos aquí”.
Cuenta que, por momentos, Gaza “se siente menos como una ciudad y más como el residuo de una pesadilla que le pertenece a alguien más, algún espectador lejano que lo soñó y luego olvidó despertarse”. Y que allí, “no caminamos; estamos a la deriva. No comemos; buscamos. No dormimos; seguimos alerta, oídos afinados al sonido que nos hará correr”.
“Y aún así, en mitad de todas estas rutinas rotas, todavía me encuentro con momentos que me recuerdan a nuestra humanidad terca. Una mujer rompe su último trozo de pan sin levadura por la mitad y se lo ofrece a su vecino. Un niño dibuja flores luminosas sobre una pared ennegrecida por el fuego y el hollín”.
El texto, que vale leer completo, porque Alaa Alqaisi lo escribe para “que no digan que Gaza guardó silencio”, se publicó originalmente en inglés, en la revista Arab Literature Quarterly, el miércoles 23 de julio. Esa publicación “eligió a Anfibia para publicar su versión en español”. La traducción –que se tituló “El aullido del hambre”- es de Magdalena Arias.
Portada: UNICEF/Mohammed Nateel
Fuente: https://canalabierto.com.ar