Página/12 con salarios de hambre
La precaria situación de larga data se agudizó con la asunción de Víctor Santa María al frente del diario. Hoy sus trabajadores cobran por debajo de la línea de indigencia: “$234 mil es el salario de un redactor con antigüedad”, cuentan sus delegadas.
Redacción Canal Abierto | “$234.000, un redactor con años de antigüedad”. La cifra que antecede es el sueldo promedio de cualquiera de los compañeros de Inés Hayes y Ailín Bullentini, periodistas y delegadas del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SiPreBA) en Página/12, quienes, en diálogo con Canal Abierto, aseguran: “Lo contamos y no lo pueden creer, los trabajadores del diario somos indigentes”.
Este número que escandaliza es sólo un botón de muestra de la dramática situación que están atravesando los trabajadores del diario que, desde su fundación en 1987, se constituyó en el emblema del nuevo periodismo argentino y en sinónimo de prensa de calidad.
Sin embargo, como sostiene Hayes, el matutino de tirada nacional “escribe una cosa, salen tapas denunciando y criticando el ajuste de Milei y después, para adentro, paga salarios de miseria, de hambre”.
Igual, pero peor
Si bien la situación de todo el gremio de trabajadores de prensa es delicada —atravesada como pocas por la precarización, los bajos salarios y el pluriempleo, tanto en medios públicos como en privados— Página/12, perteneciente al Grupo Octubre, es la única empresa que todavía no pagó a sus trabajadores la totalidad de la paritaria acordada en abril, que corresponde a los últimos cuatro meses.
“Nuestra situación empeoró bastante desde que Víctor Santa María, secretario general del SUTERH (trabajadores de edificios) compró el diario, en 2016 —cuenta Bullentini—. Nuestro acuerdo paritario va de mayo a abril y estuvimos los primeros meses del año, que fueron los peores para todas y todos los argentinos, negociando un acuerdo paritario con las cámaras de medios. Los dueños de Página/12 recién hoy nos pagaron una parte muy pequeña de ese acuerdo que de todas maneras no garantiza que nuestro salarios suban por encima de la canasta de indigencia”.
En 2016, el principal argumento de Santa María, a la hora de ajustar sueldos, fue la falta de pauta oficial, que la presidencia de Mauricio Macri le recortó, en franca contraposición con su línea editorial. Lo mismo hizo Javier Milei.
“De todas maneras, cuando Página/12 sí tenía pauta oficial, y bastante, eso no se tradujo en una mejora en nuestra situación. En 2016 un sueldo de un trabajador de prensa de Página/12 estaba 16 puntos por arriba de la Canasta básica y hoy estamos más de 40 puntos abajo”, aclara Bullentini.
Para abril de 2024, el INDEC calculó la Canasta básica total, que establece la línea de pobreza para una familia tipo en $828.158, y la Canasta básica alimentaria, que fija la línea de indigencia, en $373.044.
Diciplinamiento vs. organización
De igual manera, explican que el diario ha estado hasta ocho meses sin pagar los acuerdos paritarios —sólo porque no se homologaban— y que establece una “discriminación sindical” entre quienes adhieren a las medidas de fuerza acordadas en asamblea y llevadas adelante para reclamar por esta situación, y quienes no.
De los cerca de 250 trabajadores y trabajadoras, contando a los colaboradores permanentes y no permanentes “hay un grupo de trabajadores que no se adhirió a las medidas votadas en asamblea y que ha recibido aumentos a cuenta”.
“Somos trabajadores altamente dedicados, muchos de nosotros especializados en determinado tema, que es lo que caracteriza a Página/12: es un diario que dentro del mapa de medios nacional ocupa un rol muy importante, hoy sobre todo, porque se dedica a desarrollar una línea crítica respecto de la línea gubernamental —cuenta Bullentini, redactora especialista en derechos humanos—. Pero con este nivel de ingresos cada vez nos vemos más imposibilitados para poder llevar a cabo bien nuestra tarea, para dedicarnos a investigar, a trabajar con fuentes, para darle a Página/12 la calidad que históricamente tuvo. Cualquiera que lea el diario hoy se va a dar cuenta de que Página/12 no es lo que era porque sus trabajadores y sus trabajadoras ya no pueden sostener la vida”.
El diario es uno de los pocos medios que tiene una agenda permanente de cobertura de juicios de lesa humanidad, sobre todo desde el cierre virtual de la Agencia Télam.
Hayes, por su parte, es redactora de “Las 12”, suplemento que nació en 1998, el primero de temática transfeminista de América Latina, que el pasado 8 de marzo dejó de salir en papel y que hoy sobrevive en la Web, sostenido gracias a sus lectores y lectoras que lo siguen masivamente en redes.
Ambos temas son cubiertos por muy pocos medios privados y el enfoque de Página/12 constituye un bastión de resistencia frente a “un gobierno de corte tan claramente negacionista”, explican las periodistas.
El diálogo con las autoridades del diario sigue abierto, pero la situación reclama una solución urgente que por ahora no llega. “Los compañeros y las compañeras no dan más. No llegan a cubrir las necesidades básicas, a pagar la luz, el gas, los servicios, Internet, la comida, la prepaga. Pero tenemos una asamblea muy fortalecida y vamos a seguir apostando a eso”, sintetiza Hayes.
Entrevista: Gladys Stagno
Fuente: https://canalabierto.com.ar