Se conmemora el Día Nacional de la Libertad Latinoamericana, un recuerdo perpetuo del General Martín Miguel de Güemes
Este 17 de junio se cumple el 203° aniversario del Paso a la Inmortalidad del General Martín Miguel de Güemes.
Este 17 de junio se cumple el 203° aniversario del Paso a la inmortalidad del General Martín Miguel de Güemes y, desde 1999, Argentina estableció el Día Nacional de la Libertad Latinoamericana en virtud de la Ley Nº 25.173. El salteño fue defensor de la frontera norte contra la invasión realista, lo que permitió al General San Martín encarar sus campañas de Chile y Perú.
Güemes nació en Salta el 8 de febrero de 1785 en el seno de una familia noble. Cursó sus estudios primarios en su ciudad natal, alternando la enseñanza formal con el aprendizaje de las labores campesinas en las fincas que poseía la familia. A los 14 años se incorporó como cadete de una Compañía del Regimiento Fijo de Infantería de Buenos Aires.
En 1805 fue trasladado a Buenos Aires, donde comenzó a defender la integridad territorial actuando heroicamente durante las invasiones inglesas. Durante 1810, al servicio de la causa revolucionaria, se desempeñó al mando de un Escuadrón Gaucho en la Quebrada de Humahuaca, impidiendo la comunicación entre los opositores al nuevo régimen y los realistas del Alto Perú.
En Suipacha, único triunfo de las armas patriotas en el intento de recuperar el valioso territorio altoperuano, la participación del capitán Martín Miguel de Güemes fue decisiva.
En 1814, el General José de San Martín le encomendó el mando de la Avanzada del Río Pasaje (hoy llamado Juramento), iniciando la Guerra Gaucha. Al año siguiente, derrotó al ejército invasor al mando de Joaquín de la Pezuela en Puesto del Marqués. El pueblo lo aclamó Gobernador de la Intendencia (integrada entonces por las ciudades de Salta, Jujuy, Tarija, Orán y distritos de campaña).
Güemes: una vida dedicada a la Patria
El Director Supremo Juan Martín de Pueyrredón le encomendó «la defensa de las Provincias Unidas y la seguridad del Ejército Auxiliar del Alto Perú«. Se encontraba en Tucumán reorganizándose después de ser derrotado en Sipe Sipe. Entonces, las milicias gauchas al mando del heroico salteño pasaron a desempeñarse como ejército en operaciones continuas, al servicio de la Patria.
Por su meritorio accionar, San Martín lo designó General en Jefe del Ejército de Observación y le encomendó la misión de auxiliarlo en la liberación del Perú.
En 1821, Güemes se encontró rodeado de enemigos. Uno de los más poderosos y temibles fue el Gobernador de Tucumán. Este se negó a entregarle el armamento que había pertenecido al Ejército Auxiliar y evitó que su par santiagueño lo auxiliara.
En mayo, acusándolo de tirano, el Cabildo de Salta lo depuso, en alianza con el General Pedro Antonio Olañeta. Güemes recuperó el poder días después, pero la noche del 7 de junio, una partida realista guiada por enemigos internos del prócer lo hirió. Murió diez días después, en Cañada de la Horqueta, a los 36 años. Entonces se convirtió en el único general argentino caído en acción de guerra externa. Sus restos descansan en el Panteón de las Glorias del Norte de la República, ubicado en la Catedral Basílica de Salta.