A pesar del ajuste y los recortes de Macri y Milei, habrá más de 15 corsos de carnaval en CABA
Las murgas del circuito porteño confirmaron que el Carnaval 2024 se realizará pese a la reducción de espacios. Los delegados murgueros lograron conseguir que el gobierno del PRO autorice al menos 15 sedes, y siguen negociando por otras seis.
Redacción Canal Abierto | Las 130 murgas que componen el circuito oficial de la Ciudad de Buenos Aires confirmaron la semana pasada mediante un comunicado que, pese a los recortes provenientes del gobierno porteño y del ajuste promovido por la administración nacional de Javier Milei, los corsos se llevarán adelante durante todos los fines de semana de febrero y el lunes 12 y martes 13, feriados de carnaval.
“Desde las 19 y hasta las 2 de la madrugada los sábados y feriados, y hasta la medianoche los domingos y martes de carnaval, vecinos y vecinas, familias, jóvenes, niños y niñas podrán disfrutar de las agrupaciones artísticas -las grandes protagonistas de esta fiesta callejera, barrial y gratuita con corsos en plazas, parques, calles, polideportivos y anfiteatros porteños”, dijeron las murgas en sus redes sociales.
La gestión de Jorge Macri pretendía reducir los lugares en los que se realizarán las celebraciones. El año pasado fueron 35 corsos y, según informaron algunos medios, el gobierno buscaba reducirlos a ocho en 2024. Las murgas reclamaban que sean 28.
Finalmente, Canal Abierto pudo confirmar que la presión de los representantes de las organizaciones culturales logró ampliar el número a 15, hasta el momento, y siguen negociando condiciones por otros seis espacios.
Las discusiones se extienden entre representantes del Ministerio de Cultura porteño y miembros de la Comisión de Carnaval, integrada por delegados de las más de 130 murgas radicadas en la ciudad.
El gobierno local debe garantizar el escenario, las vallas, baños químicos, sonido, gasista matriculado y otros servicios. Las asociaciones civiles tienen a cargo la venta de productos relacionados con el carnaval como los pomos de espuma y la gastronomía –principalmente de parrillas– y bebidas, aunque también se involucran en temas centrales para la convocatoria como la seguridad.
“El presupuesto 2024 estará enfocado en poder garantizar que los corsos en los barrios tengan una buena calidad para el disfrute y seguridad de sus asistentes, al tiempo que garantice la seguridad y tránsito del resto de vecinos de la ciudad”, informaron fuentes oficiales al diario La Nación.
En su obsesión por mantener liberado el tránsito vehicular -que de todas formas se ve altamente disminuido los fines de semana, por las noches y en un mes de vacaciones-, el gobierno busca que las nuevas ubicaciones se centren exclusivamente en plazas y parques.
A pesar de la dura negociación, la realidad porteña contrasta con la de otros municipios cercanos, como Ensenada y La Matanza, de gobiernos peronistas, que decidieron suspender completamente los carnavales de este verano por la difícil situación económica y social del país.
En la Ciudad Autónoma son más de 15.000 murgueros los que forman parte de las 130 murgas registradas, con entre 20 y 700 integrantes la más numerosa (Los Amantes de la Boca).
Muchos de los grupos también organizan eventos propios o compartidos sin participación del gobierno.
Sin embargo, existen otra gran cantidad de agrupaciones que no forman parte del circuito oficial por una decisión política de no vincularse con el Estado o con un gobierno de derecha como el del PRO, según el caso, o simplemente porque no clasificaron en el proceso de selección. Todas ellas arman sus propias salidas en algunos barrios de CABA y en otros distritos bonaerenses, y muchas también forman parte de una red autónoma que se las rebusca de manera independiente para sostener los festejos de febrero.
Foto principal: Murga Perdidos por Parque Chas, enero 2024