En este mes, algunos de los incrementos esperados serán de las naftas, prepagas, electricidad y colegios privados, además de otros rubros de la canasta familiar. También, se incluyen los boletos de trenes y los alquileres.

Esto ocurre en un contexto en el que la inflación de enero fue del 20,6 por ciento. En tanto que el costo de la canasta básica alimentaria (CBA) aumentó un 18,6 y de la total (CBT) fue del 20,4 por ciento. Por eso, algunas consultoras privadas esperan que el Índice de Precios al Consumidor ronde el 17 por ciento.

Combustibles

El Gobierno confirmó un aumento en marzo de los precios del 4,4 por ciento a partir de este viernes 1. Esta suba es la segunda suba en los impuestos al combustible líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC).

Transporte de larga distancia

En este caso, los trenes de larga distancia tendrán nuevos valores de referencia. Por ejemplo, Buenos Aires-Mar del Plata saldrá 4.493 pesos; Buenos Aires-Pinamar estará 3.896 pesos; y Buenos Aires-Bahía Blanca, 7691 pesos.

Colegios privados

Por su parte, los colegios de gestión privada del AMBA aumentarán entre el 40 y el 50 por ciento. Sin contar el valor de las subas en la ropa colegial, como los uniformes, y la canasta de útiles escolares.

Prepagas

El aumento será del 23 por ciento promedio sobre el valor de febrero. Es el tercer ajuste consecutivo en lo que va del año. Cabe recordar que los afiliados recibieron un alza en los aranceles del 30 en enero y del 26 por ciento en febrero.

Tarifas de electricidad

Según la Secretaría de Energía continua la segmentación de tarifas para los usuarios de ingresos altos, medios y bajos. Sin embargo, las boletas de luz alcanzarán subas del 150 por ciento.

Las tarifas del Nivel 1 (es decir, los ingresos más altos) pasarán de 13.900 pesos a 34.332 pesos; para el Nivel 2 (bajos ingresos) la tarifa se ubicará en alrededor de los 7.500 pesos, lo que representa un alza del 70 por ciento, y para los del Nivel 3 (ingresos medios), la suba estimada rondará el 65 por ciento.

Alquileres

A pesar de que el Gobierno actual derogó la ley de alquileres, los contratos vigentes de la ley anterior se deben cumplir hasta su vencimiento. Por lo tanto, los inquilinos regulados en la normativa previa deberán afrontar subas del 165,5 por ciento anual.