En ese sentido, el sindicalista consideró que la iniciativa “es muy importante”, sobre todo “porque el Gobierno no piensa en los trabajadores que son los que están produciendo”. Cabe recordar que, la legisladora Brenda Vargas Matyi le informó a este medio que la norma busca “evitar despidos, cesantías, suspensiones, en todo el territorio nacional, hasta el 31 de diciembre de 2027”.

Asimismo, el dirigente sostuvo que “tiene que haber un cambio de estrategia por parte del Gobierno”, ya que “la Argentina tiene que crecer con trabajo genuino y desarrollo”. “Son cuestiones fundamentales en cualquier país del mundo”, indicó. Así las cosas, advirtió que “no hay diálogo con la administración nacional”.

“Respetamos que el Gobierno haya sido elegido legítimamente, pero así como hay que decir las cosas que están bien, también tenemos que decir las que están mal y una de estas es que el aparato productivo está paralizado”, manifestó.

La situación de los trabajadores de la construcción

Además, puso el foco en la situación que está atravesando la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), al señalar que “hay obras que quedaron a medio hacer” y “aunque el Municipio y la Provincia intentan reactivar, no alcanza para la demanda de las y los trabajadores”.

“La obra pública tiene que ser una inversión, no un gasto, porque es allí que se ve el desarrollo de un territorio”, resaltó. En sintonía, añadió que “el Estado, como principal impulsor del crecimiento de un país, tiene que apostar fuertemente a ello”.

Así, subrayó que los trabajadores del sector “están padeciendo” la decisión del Gobierno nacional de paralizar la obra pública. “Somos nosotros, albañiles, plomeros, gasistas, electricistas, los que trabajábamos en las obras del Gasoducto Néstor Kirchner”, ilustró.

De esta manera, comentó que “en Virrey del Pino, una obra de dos plantas de tratamiento que contaba con 150 compañeros  hoy tiene solo seis y recién lleva un 20 por ciento de ejecución”. “Las obras del Procrear también se pararon”, sumó. “Esto no parece tener vía de solución ni a corto ni a largo plazo”, continuó.

“El Presidente había dicho en campaña que las obras avanzadas no se iban a parar, pero también se pararon y las empresas que brindaban servicios no cobran”, expresó y alertó que “lo que absorbe la parte privada es muy poco porque también está en declive”.

Por último, planteó que “todos estos temas se ponen en común, a diario, con las diferentes organizaciones sindicales y la mayoría está en decadencia”. “La consecuencia de esto la pagamos los trabajadores y nuestras familias”, culminó.