Comienza el segundo juicio por el caso Candela: el banquillo tendrá cuatro acusados
Un narco, un “buchón”, un expolicía y un carpintero serán juzgados por el secuestro y crimen de la Candela Sol Rodríguez, de once años, asesinada en agosto de 2011 en Villa Tesei.
A más de doce años del crimen de Candela Sol Rodríguez, la niña de once años secuestrada y asesinada en la localidad de Villa Tesei, partido de Hurlingham, la Justicia inicia un nuevo juicio oral.
Un capo narco, un expolicía bonaerense, un «buchón» de las fuerzas de seguridad y un carpintero. Esos son los acusados que se sentarán en el banquillo, en el segundo juicio por el secuestro y crimen cometido en agosto de 2011.
El juicio estará a cargo del Tribunal Oral Criminal (TOC) 6 de Morón. Y el único de los acusados que llegará al debate preso es el narco Miguel Ángel «Mameluco» Villalba. Tiene 61 años y está alojado en el Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza, donde cumple una condena a 27 años de prisión por narcotráfico.
Según la acusación del fiscal Mario Ferrario, «Mameluco» Villalba, el «buchón» Héctor Horacio «Topo» Moreira, de 57 años; el expolicía bonaerense Sergio Fabián Chazarreta, de 62 años, y el carpintero Néstor Ramón Altamirano, de 67, fueron «coautores» de la «privación ilegal de la libertad coactiva seguida de muerte» de Candela.
Cómo será el segundo juicio por el caso Candela
Este nuevo debate comenzará con la lectura de elevación a juicio en los tribunales de Morón. Serán diez audiencias en las que comparecerán cien testigos. Ellos darán cuenta de las conductas desplegadas por cada uno de los cuatro acusados del secuestro y asesinato de Candela.
La primera declaración testimonial será la de la madre de la niña, Carola Labrador. La Justicia llevará diariamente a «Mameluco» desde el penal a los tribunales para participar del debate. De modo que Labrador tendrá frente a frente a todos los acusados.
En agosto de 2017 la Justicia condenó a prisión perpetua Hugo Bermúdez y Leonardo Jara por el mismo crimen. Un tercer hombre, Fabián Gómez (46), recibió una pena de cuatro años de encierro como «partícipe secundario» de la «privación ilegal de la libertad» de la niña.