Tras cerrar un nuevo acuerdo salarial con el Gobierno bonaerense que encabeza Axel Kicillof, la secretaria general del SUTEBA de La Matanza, Daniela Sposato, valoró que la Provincia “siga abriendo mesas de negociación con los sindicatos y continúe incrementando sueldos”. “Es para destacar”, enfatizó al advertir que “el poder adquisitivo de las y los trabajadores está en deterioro por las políticas económicas que implementa el Gobierno nacional”.

“Somos de los pocos que todavía tenemos mesas paritarias”, indicó. Así, expuso que, previamente, el monto ofrecido desde el Ejecutivo “se puso a consideración de todos los frentes gremiales”. “En los plenarios realizados por los sindicatos, se aprobó el incremento del 6,5 por ciento en nuestro salario”, comentó. La suba supera casi por dos puntos la cifra de inflación que, en junio, fue de 4,6 por ciento.

El incremento del 6,5 por ciento para los trabajadores estatales bonaerenses es aplicable sobre el salario de junio. En ese sentido, según informó el ministro de Economía de la Provincia, Pablo López, lo percibirán jubilados y jubiladas, la Policía bonaerense, el Servicio Penitenciario, docentes, médicos y judiciales.

Conforme a lo explicado desde el sindicato, la propuesta lleva el salario de las y los maestros de grado inicial a 470.026 pesos. El de las y los docentes con quinta hora sin antigüedad a 595.608 pesos. Para jornada completa a 940.052 pesos y para docentes con 20 módulos a 637.291 pesos.

La titular del SUTEBA, sobre el SMVM

Asimismo, la sindicalista se refirió a la nueva convocatoria al Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM), estipulada para el próximo 18 de julio. “Las reuniones vienen siendo una burla al conjunto de los trabajadores”, manifestó. “Son virtuales, participan solo algunos y nunca hay una propuesta concreta”, cuestionó.

“La realidad es que no queremos solamente una propuesta en relación al salario mínimo, sino una discusión verdadera sobre la redistribución de la riqueza”, lanzó. “Los ingresos deben ser repartidos justamente porque los trabajadores merecen vivir dignamente”, subrayó Sposato. En esa línea, señaló que “son pocas las expectativas que hay”, aunque “muy grande la preocupación”.

Por último, remarcó que “los trabajadores están perdiendo no solo poder adquisitivo sino también derechos”, por lo que “la situación de violencia se incrementa”. “Falta comida en lo espacios comunitarios y todo hace a un clima de mucha violencia y angustia”, alertó. Asi, concluyó: “Tenemos que organizarnos fuertemente para poder conseguir mejores condiciones y que haya una justa redistribución”.