Fabricaciones Militares en la mira privatizadora

Redacción Canal Abierto | Trabajadores de las plantas de Fabricaciones Militares alertan sobre la posibilidad de que la empresa entre en la oleada neoprivatizadora que a través de la reglamentación de la Ley Bases se impulsa desde el Gobierno.

A pesar de que en la versión del proyecto oficialista aprobada en junio por el Congreso Fabricaciones Militares estaba incluida en la lista de empresas y organismos estatales excluidos de la posibilidad de cierre o privatización, Eduardo Bercovich, Secretario General de ATE Azul -donde se encuentra una de las plantas de Fabricaciones Militares más importantes-, señala ante la consulta de Canal Abierto que “se apoyan en el DNU, que les permite transformar una sociedad del Estado, como es Fabricaciones Militares, en una sociedad anónima. Y, a partir de allí, avanzar con su privatización”.

Al respecto, Bercovich detalló que la planta de Azul ya recibió visitas de contingentes de empresas de dos países. Se trata de la española Hispania y el CSG Group de República Checa. A esto se suma otra a la instalación de Río Tercero por parte de personal de la Secretaría de Estado norteamericana.

“Entendemos que en Fabricaciones Militares hoy hay un cartel que dice `Se remata´. Para el Gobierno es la única inversión que puede haber es pasándola sociedad anónima y haciendo que otro país maneje nuestra industria de defensa”, lamenta Bercovich.

Y alerta que “esto es sumamente grave, sobre todo porque el Gobierno quiere incorporar al país dentro de la OTAN y hacer municiones para Ucrania, cosa que nos metería y nos embarcaría en un en un problema bélico muy importante a nivel mundial. Nosotros somos un país sumamente pacífico, así que creemos que este no es el camino”.

Por otra parte, el dirigente gremial indica que “Fabricaciones Militares no solamente es una empresa, sino que es soberanía y defensa de la industria nacional. Nosotros tenemos la gente y tenemos el material para producir. Pero este gobierno viene por el desguace de toda la industria nacional y viene por la privatización y el remate de todas las empresas del Estado nacional”.

Al momento de la llegada de Javier Milei a la Presidencia de la Nación, Fabricaciones Militares tenía un contrato con la minera peruana Orica para la provisión de mastermix, un explosivo usado en esa industria. Este compromiso fue cortado por el Gobierno.

“Teníamos un contrato que venía de la gestión de Fernández por el cual durante cinco años, teníamos que proveerle cierta cantidad de materia de materiales de explosivos. Si no cubríamos los objetivos, íbamos tener una multa muy importante en dólares, cosa que seguramente vamos a tener que pagar”, advierte Bercovich.

Y recuerda que “hasta mayo seguíamos enviando camiones con explosivos. Pero el Gobierno dice que ahora el contrato se cayó y que  hay mucha cantidad de material que no se vende. Pero  nosotros sabemos que la realidad era otra. Teníamos un mail también del director de ventas de Fabricaciones Militares diciéndonos que aumentemos la producción a más de 23.000 kilos para poder abastecer porque teníamos todo vendido. Y tres meses después tenemos toda la planta parada”.

Mientras tanto ya aparecieron los comunicados ofreciendo jubilaciones anticipados y retiros voluntarios.  La junta interna de ATE en Fabricaciones Militares denuncia que estas medidas implican despidos encubiertos.

“Hay mucha cantidad de trabajadores que tienen muchísimos años de capacitación para poder estar en el lugar. Por ejemplo, una persona que es muy importante donde se hace el explosivo es un trabajador que tiene más de mil horas de capacitación. Eso te lleva años. Y si esta persona toma el retiro o la jubilación, lo que hacen es dejarnos sin recursos humanos que por un lado sabemos que no van a cubrir, porque lo que quieren el desguace y que no queden trabajadores estatales, pero por otro que esta persona tiene a cargo una labor que no podría hacer un recién ingresado, concluyó Bercovich.

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