Con entrada gratuita, cientos de personas recorrieron las aulas, disfrutaron y conocieron en detalle los proyectos de electrónica y electromecánica que elaboraron los alumnos de primero a séptimo año del colegio secundario técnico ubicado en Evita 66, Ciudad Madero.

Además de los trabajos que conjugaron tecnología y desarrollo, hubo exposiciones; demostraciones en vivo, actividades interactivas; shows musicales y talleres educativos para conocer las últimas tendencias de la técnica y las ciencias aplicadas.

Instituto Madero: “Formar excelentes técnicos y mejores personas”

En este marco, el director de la Escuela Secundaria Técnica, Eduardo Tibaldi, dialogó con El1 y destacó algunos de los proyectos. En electromecánica, se construyó un auto nuevo para competir en el desafío ECO YPF en Entre Ríos. Se realizó un convertidor de doce a 220 voltios con paneles solares; una vitrina de seguridad con sistema PDLC antirrobo, un karting, un brazo neumático. En electrónica, estuvieron los robots. También, el colegio adquirió un equipamiento nuevo este año que es un analizador de espectro, y ello permitió hacer prácticas para las aéreas de comunicaciones”.

Y en este contexto, enfatizó: “La feria siempre es un hito para el colegio. La idea fue mostrar lo trabajado durante el año, mostrar el esfuerzo que hicieron los profes y los chicos”.

Alejandro Cazzaniga, docente hace más de diez años en el IM y jefe del área de electrónica, también dio un detalle pormenorizado de los trabajos efectuados a lo largo de este 2024. “Proyectos de electrónica analógica; digital; placas microcontroladas tanto con sistema arduino como con Raspberry Pi; sistemas de robótica; una centralita meteorológica; una estación de transmisión FM. Fue un año muy completo con muchos proyectos”, resaltó.

“El Instituto Madero es la posibilidad de dejarles a los chicos esta semilla que es la pasión por la electrónica. Es poder dejarles habilidades y conocimientos. El IM trata, además de tener muy buenos técnicos, es tener buenas personas. Esa es la búsqueda: personas empáticas, que puedan trabajar en grupo, ayudar a otros, con aprendizaje colaborativo”, sumó con orgullo.

Por último, Tibaldi cerró: “Nuestros alumnos cuando egresan salen bien formados. Tienen experiencia laboral porque hacen prácticas profesionalizantes en empresas. También, salen bien preparados académicamente para seguir estudiando a nivel universitario. Además, siempre están acompañados desde la parte humana, en la formación de valores y principios”.