La justicia federal procesó al militante libertario que amenazó a Grabois y otros referentes políticos
“El que las hace, las paga”, celebró el líder de Patria Grande, parafraseando a Patricia Bullrich. Agustina Lloret, abogada del CELS, organismo que integra la querella, habló de la importancia de la medida. “Marca un límite legal a la violencia en redes”, destacó.
Redacción Canal Abierto | “Bueno gente. Más que nada para Grabois, Moyano, Pérsico todavía no saltó, Baradel, Pollo Sobrero, los hago responsables a ustedes de lo que pueda llegar a pasar con sus militantes en la marcha que están programando hacer”. Así comenzaba el video de Tik Tok en el que Marco Antonio Chediek, militante de La Libertad Avanza, amenazaba explícitamente a un conjunto de dirigentes sociales y sindicales.
“Fijate lo que le pasó a (Evo) Morales, lo quisieron linchar. A vos en la 9 de Julio te tenemos regalado”, decía en otro de los tramos más virulentos en el que se refería en particular hacia el dirigente de Patria Grande. “Estás notificado, hacé lo que vos quieras. Pero tené el pasaje reservado por las dudas. Llevá varios matafuegos, viste que siempre se prende fuego todo. Y chalecos, porque de este lado no hay balas de goma”, remataba.
Tras la denuncia presentada por un equipo letrado de UTEP junto al Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), el juzgado federal a cargo de Daniel Rafecas decidió procesar a Chediek por “amenazas” e “incitación a la violencia colectiva”.
La medida la dio a conocer el propio Grabois a través de sus redes sociales. “Primer procesado por amenazas e incitación a la violencia colectiva contra varios dirigentes y organizaciones, en particular contra nosotros”, destacaba.
“El señor Chediek, empresario y activista de La Libertad Avanza, fue además embargado por varios cientos de miles. Ello a raíz de un video en Tik Tok donde dice explícitamente que me cuide porque estaba “regalado” y que “ellos” me iban a matar”, señalaba.
¿Hasta dónde?
En diálogo con Canal Abierto, Agustina Lloret, del equipo de litigio estratégico del CELS, explicó la importancia de un proceso judicial que marca “un límite legal” a la violencia que todos los días se reproduce en las redes sociales, en particular, hacia personas expuestas públicamente, del ámbito de la política o que simplemente expresan sus ideas políticas en redes.
“Las amenazas en general vienen de personas que no se pueden identificar. En este caso puntual fue posible, y hay un proceso judicial abierto, que avanza considerablemente, que permite fijar estándares de lo que es admisible y de lo que es inadmisible, en términos del uso de las redes sociales”, precisó.
Tal es así –indicó Lloret- que Rafecas “hace un acápite particular que habla de la libertad de expresión y de cómo Chediek al decir las cosas que dijo, al expresar las amenazas que expresó e incitar colectivamente a la violencia, dirigiéndose específicamente a un grupo de personas indeterminadas, manifestantes, referentes, seguidores de las ideas políticas de Grabois y Baradel, y de las ideas políticas de los organismos de derechos humanos, excedía ampliamente lo que es la libertad de expresión”.
En ese sentido, el magistrado tuvo en cuenta al menos tres elementos para tomar su decisión. Primero, la forma en que Chediek, permanentemente, se expresa en plural, llamando a la acción al resto de los integrantes de su espacio político. Segundo, la utilización de Tik Tok como vía amplificadora. “Y esto, en particular, vinculado a la incitación a la violencia colectiva, porque no es lo mismo arengar en una reunión chica que arengar en las redes sociales”, aclaró la abogada.
Otra cuestión que tuvo en cuenta Rafecas fue que “evidentemente se infundió temor en las personas amenazadas –Grabois y Baradel-, en la medida en que los dos fueron a hacer la denuncia, en la medida que los dos se presentaron como querellantes, en la medida que los dos buscan el refugio de la justicia”.
Chediek y su vínculo con las fuerzas armadas
A pesar de que en sus videos insinúa pertenecer a las fuerzas de seguridad, el juez descartó esa hipótesis luego de librar oficios a distintos organismos. Sólo se pudo constatar que se recibió de técnico mecánico de aviación en la Escuela Nacional Técnica N° 1 de la Fuerza Aérea en El Palomar y que actualmente se dedica al rubro de la construcción.
Un dato que sí llamó la atención de la querella es que el defensor de Chediek es Guillermo Jesús Fanego, un abogado conocido en el ámbito de los juicios de lesa humanidad por representar a genocidas. En octubre pasado tomó visibilidad cuando a pedido de su defendido, Horacio Ferrari -o “Pantera”, como se hacía llamar en sus tiempos como integrante de la patota que secuestraba militantes por las calles y luego los torturaba en el sótano del Casino de Oficiales de la ESMA-, pidió censurar al medio comunitario La Retaguardia.
“No jodas con los milicos, te lo dijimos. Te lo vengo diciendo, no jodan con los milicos. No tenemos nada que perder. Ustedes tienen mucho más que perder, tienen familia, hijos”, le había lanzado Chediek a Grabois.
Tal como informó el CELS, el caso es uno de los 262 registrados entre 2020 y 2023 por la herramienta colaborativa Rad-Ar, el Registro de Ataques de las Derechas Radicalizadas de Argentina, impulsado por ese organismo junto al Equipo de Investigación Política (EDIPO).
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Ilustración: Marcelo Spotti
Fuente: https://canalabierto.com.ar