Politica

La libertad de expresión no avanza

El Presidente mantiene sus millonarias demandas contra los periodistas Fabián Doman, Débora Plager y Martín Candalaft, que lo trataron de “facho” cuando era diputado. El juez evitó la mediación porque entiende que Milei no pretende un acuerdo conciliatorio.

Por Néstor Espósito | El presidente, Javier Milei, mantiene activa una millonaria demanda judicial contra tres periodistas que cuestionaron sus actitudes y conductas cuando se perfilaba como candidato a las elecciones presidenciales de 2023 en las que finalmente triunfó en el balotaje sobre Sergio Massa.

Se trata de una demanda de “daños y perjuicios” contra los expanelistas del programa de televisión “Intratables”, por la señal América, Fabián Doman, Débora Plager y Martín Candalaft.  Inicialmente también estaba incluido Paulo Vilouta, pero tras un pedido de disculpas el hoy jefe del Estado depuso su demanda y el expediente se cerró.

Milei les reclama a los periodistas cuatro millones de pesos, más actualizaciones, a valores constantes desde el momento en que ocurrieron los hechos que, según explicó en el expediente, lo mortificaron. Según la demanda, el 17 de junio de 2022, Milei fue calificado como “facho” y “nazi” en la emisión de “Intratables”.

Doman, quien era el conductor de Intratables, cuestionó las expresiones de Milei respecto de una supuesta superioridad de los libertarios respecto de “los zurdos”. El periodista opinó que “decir ‘somos estéticamente superiores’ es un concepto facho”. La panelista Plager terció: “Muy hitleriano”. Se trató, queda claro, de opiniones críticas sobre una expresión controversial del por entonces diputado nacional, es decir un personaje público.

Hay profusa jurisprudencia de la Corte Suprema a favor de la libertad de expresión en circunstancias similares a estas.

Con Vilouta, el Presidente concilió, aceptó las explicaciones sobre lo ocurrido y desistió de la acción judicial, pero la mantuvo respecto de los demás.

En los últimos días, el titular del juzgado Civil número 33, el juez Horacio Liberti, desestimó un planteo de los periodistas para sentarse cara a cara con Milei y solucionar extraoficialmente el entuerto. Las defensas de Doman, Candalaft y Plager sostuvieron que no se había cumplido el paso obligatorio de la “mediación” previa a la apertura formal del juicio. Pero el juez replicó que “cuando se infiere con alto grado de convicción que no se verifica posibilidad actual mínima de conciliación entre las partes, es posible soslayar un trámite que importaría prolongar injustificadamente el desarrollo del juicio”.

El juez advirtió que no hay forma posible de que Milei desista de la acción judicial y que el paso de la mediación no se cumplió esencialmente porque los periodistas no pudieron ser notificados de esa instancia. “Del acta de mediación acompañada por el actor (Milei, ndr)  surge que los demandados no pudieron ser notificados, sin perjuicio de que se acompañan las cartas documentos enviadas al mismo domicilio denunciado en el escrito inicial de los demandados, siendo por ello evidente no haber dado cumplimiento con la instancia previa obligatoria”.

“Un criterio realista conduce a no imponer la reapertura de la instancia extrajudicial -con la consecuente paralización de las actuaciones- cuando, como en el caso, ha sido contestada la demanda y de los términos en que quedó trabada la litis no resulta ánimo conciliatorio por parte de alguna de las partes”, añadió el magistrado Liberti.

No obstante, el juicio sigue frenado. Hay un tema pendiente sobre la situación de Candalaft que aún no se resolvió, por lo que el juez dispuso: “Manténgase la suspensión decretada en autos, hasta tanto se decida lo que corresponda, respecto al demandado”.

El millonario reclamo de Milei está a la espera de esa resolución. El próximo paso es la apertura del expediente para el aporte de pruebas y testigos, y más tarde el fallo de primera instancia.

Milei tiene otra causa civil abierta, en ese caso contra la exdiputada Elisa Carrió, que tramita ante el juzgado civil número 22, cuyo titular es Ignacio Rebaudi Basavilbaso. El Presidente le reclama tres millones de pesos (más las actualizaciones por inflación) a Carrió, quien en un reportaje –entiende el mandatario- lo comparó con Adolf Hitler. “Puede saber de economía, pero puesto como presidente puede ser Hitler. Peor todavía, porque no tiene equilibrio emocional ni templanza”, sostuvo Carrió.

Néstor Espósito: @nestoresposito

 

Fuente: https://canalabierto.com.ar

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