¡¡Llego la Hora de la verdad!!!

Por Juan Severo

Llega la hora de la verdad para los gobernadores, para los legisladores nacionales y para todos los que alguna vez dijeron que están del lado del pueblo. Porque ahora se verá, con claridad, quiénes son verdaderos representantes del interés colectivo… y quiénes simplemente negocian privilegios a cambio de obediencia.

El presidente Javier Milei ha dejado bien claro a quién responde. Mientras grita “¡viva la libertad, carajo!”, veta una ley que buscaba otorgar un 7% a los jubilados, declarar la emergencia en discapacidad y garantizar derechos previsionales básicos. Lo vetó con la soberbia que lo caracteriza, hablando desde la Bolsa de Comercio, frente a los de siempre, esos que no conocen la angustia de elegir entre remedios y comida.

Pero por si fuera poco, ese mismo gobierno que le niega derechos básicos a los más vulnerables, aplaude con euforia los USD 2.000 millones que llegan del FMI… aunque 800 se quedan en Washington y el resto se usa para una maniobra contable con Letras Intransferibles. O sea, la plata se pasa de un bolsillo del Estado a otro para simular reservas. ¿Y el pueblo? El pueblo sigue ajustando el cinturón.

¿Y los gobernadores? ¿Y los senadores? ¿Y los diputados que en unos días muchos irán a las urnas? ¿Van a seguir haciéndose los distraídos mientras su pueblo sufre? ¿Van a seguir votando todo lo que pida Milei a cambio de algún favor para su provincia? Esta es su hora de la verdad.

Porque votar en contra del veto presidencial no es solo un acto institucional: es un acto moral. Es decidir de qué lado están. Si están con los cinco millones de jubilados, con los trabajadores despedidos, con los discapacitados que ya no reciben asistencia, o con los poderosos que siguen ganando a costa del sacrificio ajeno.

Ya lo decía el tango: “el dolor de haber sido y el dolor de ya no ser”. Esa melancolía que sentimos hoy no es solo por lo que se perdió, sino por lo que no se defiende. Cambiamos el único presente digno del pueblo, aquel que aún con sus errores buscaba reparar desigualdades, por esta pesadilla que premia al más fuerte y castiga al que pide ayuda.

Nos duele ver cómo los asuntos de salud, de niñez, de discapacidad, se tiran a la basura mientras los poderosos se abrazan en la Bolsa y levantan la copa por un país en el que cada vez menos entran.

El oficialismo habla de “genocidio” cuando se intenta ayudar a los jubilados, pero no cuando se entregan las retenciones a los grandes señores del campo. El doble discurso es tan burdo que ya ni lo disimulan.

Y mientras tanto, los medios amigos nos quieren vender “las dos caras de Milei”, como si una de ellas fuera buena. Pero el pueblo no es estúpido. Conoce bien esa cara: la vio gritar en los sets de televisión, la vio vetar en silencio por el Boletín Oficial, la vio entregarse entero al poder real desde el día uno.

Ahora, compatriotas, es momento de exigirles a nuestros representantes que representen. Que no se escondan, que no se borren, que no traicionen. Porque ya no hay margen para el cinismo.

Es hora de la verdad. Y la historia no perdona a los tibios.

Basta de cuentos. Basta de versos.
Es hora de que el pueblo corte los hilos.
Es hora de que seamos nosotros los que escribamos el libreto.

Desde el Foro Matanzero, medio popular y autogestivo, decimos:

¡Que no decidan por nosotros los de siempre!
¡Que no te cambien el collar… si seguimos siendo perros!

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