MAR ROJO- COALICION PROFUNDIZA OPERACIONES DE SEGURIDAD- MIENTRAS CHINA TAMBIEN DESPLIEGA NAVIOS EN EL AREA. ANTE LOS ATAQUES DE LOS UTIES YEMENIES.

Por Daniel Ariza. Analista Política Internacional.

Como ya hemos adelantado en el informe anterior, varias fuerzas navales se han desplazado al mar Rojo para proteger el comercio marítimo de los ataques de los rebeldes Hutíes de Yemen, que han intensificado sus acciones en respuesta a la ofensiva de Israel en Gaza. Entre las fuerzas navales que participan en la operación, llamada Operación Guardián de la Prosperidad, se encuentran las de Estados Unidos, Reino Unido, Bahréin, Canadá, Francia, Italia, Países Bajos, Noruega, Seychelles y España. Estos países pertenecen a diferentes sectores, como la OTAN, la Unión Europea y el Consejo de Cooperación del Golfo. El objetivo de la operación es garantizar la libertad de navegación y la seguridad regional en el sur del mar Rojo y el golfo de Adén

La coalición liderada por Estados Unidos ya ha comenzado a trabajar con toda su fuerza frente a las costas de Yemen para garantizar la seguridad de la navegación en el Golfo de Adén, el Estrecho de Bab el-Mandeb y el Mar Rojo.

Un grupo naval formado por el portaaviones Dwight Eisenhower, el crucero Philippine Sea, tres destructores de la Armada estadounidense y la fragata Languedoc patrulla el Cuerno de África y la costa de Eritrea. A ellos también se les unirá una fragata de la Armada griega.

Por primera vez en muchos años, los aviones de reconocimiento de la Fuerza Aérea de EE.UU. se volvieron más activos en la zona: un dron RQ-4B voló desde la base aérea de Al Udeid en Qatar hacia la costa de Yemen, y un avión de reconocimiento electrónico RC-135 operó desde Sigonella, en la isla de Sicilia.

El grupo de aviación táctica también se reforzó en Eritrea y Yibuti: a los Reapers estadounidenses, que ya se encontraban en Yibuti, se unieron varios cazas Mirage 2000 de las fuerzas aeroespaciales francesas.

En general, la actividad de las fuerzas de la coalición aumenta gradualmente. Teniendo en cuenta los continuos ataques de los Hutíes y sus actividades del minado en el estrecho de Bab el-Mandeb, también está aumentando la probabilidad de ataques demostrativos contra Yemen.

Esto también se indica por la creciente atención de la inteligencia estadounidense a varios objetos bajo el control de los Hutíes: el puerto aéreo y marítimo de Hodeidah, el aeródromo de Absa y varias posiciones de Ansar Alá en la zona costera.

Cabe acotar que en las últimas semanas se produjeron varios ataques contra embarcaciones en el mar Rojo, atribuidos a los rebeldes Hutíes de Yemen, que son apoyados por Irán. Estos ataques fueron realizados con drones y misiles, y tuvieron como objetivo tanto buques comerciales como militares. Entre los buques atacados se encuentran:

• El Unity Explorer, un buque petrolero de bandera liberiana, que fue atacado el 3 de diciembre con un dron cargado de explosivos.
• El Número 9, un buque de carga de bandera panameña, que fue atacado el mismo día con un misil.
• El Swan Atlantic, un buque mercante de bandera maltesa, que fue atacado el 18 de diciembre con múltiples proyectiles.
• El USS Carney, un destructor de misiles guiados de la Marina de Estados Unidos, que fue atacado el mismo día con tres drones, que fueron derribados por el buque.

Estos ataques representan una amenaza para el comercio internacional y la seguridad marítima en el sur del mar Rojo y el golfo de Adén, por donde pasan a diario millones de barriles de petróleo. Los hutíes han reivindicado los ataques como una venganza contra Israel, por su ofensiva en Gaza. Estados Unidos ha responsabilizado a Irán de estar detrás de estos ataques y ha prometido considerar todas las respuestas apropiadas.

Por su parte China ha movilizado al menos tres buques de su armada al mar Rojo, en respuesta a los ataques de los rebeldes Hutíes contra el transporte marítimo. Se trata de la estatal Ocean Shipping Company (COSCO), una de las mayores navieras del mundo, y de las empresas Evergreen Marine y OOCL, con sede en Taiwán y Hong Kong, respectivamente.

Estos buques se han unido a la coalición multinacional liderada por Estados Unidos, que busca proteger el comercio y la seguridad en el mar Rojo y el golfo de Adén. China también ha expresado su apoyo a los esfuerzos diplomáticos para resolver el conflicto en Yemen y ha instado a todas las partes a cesar la violencia.

La convergencia de Navíos Chinos al área del Mar rojo no hace otra cosa que marcar que, a pesar de la tensa relación entre Estados Unidos y China, ante una amenaza que puede afectar el tráfico marítimo e intereses de ambas naciones ambas potencias convergen en defensa de sus respectivos intereses.

Esta situación sin dudas podría alterar el curso de las hostilidades entre Israel y Hamas y expandir aun mas el conflicto.