Milei dinamitó “el plan nuclear argentino” que promete impulsar
Entre las fake news de las que estuvo plagado su discurso aniversario, el Presidente anunció que diseñará un plan atómico que existe desde los años 50 y, gracias a sus políticas, se vio paralizado durante todo 2024. Los números y sus consecuencias.
Redacción Canal Abierto | “Vamos a diseñar un plan nuclear argentino”, soltó Javier Milei en el discurso en cadena nacional donde celebró su primer año de gobierno, enumeró sus presuntos éxitos y anticipó los que vendrán. El discurso estuvo plagado de fake news pero ésta, la del plan nuclear, compite por el podio.
Casi como dato de color, la primera mentira de esa expresión radica en una cuestión histórica que la propia Cristina Fernández de Kirchner, al asumir la conducción del PJ este miércoles, atinó en resaltar: “Oiga Milei, hace décadas que Argentina es señera en energía nuclear. ¿Y a que no sabe quién empezó con este yeite de la energía nuclear? ¡Perón!”.
Lejos de arrancar con un plan innovador, el gobierno de La Libertad Avanza se esmeró en desarmar lo hecho: en 2024, recortó el 40% del presupuesto de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).
“Milei anunció el lanzamiento de un plan nuclear al servicio de un puñado empresas ligadas a (el presidente electo de Estados Unidos, Donald) Trump que apuestan a apropiarse de nuestra experiencia de desarrollo en el área, privatizar lo que quieran y cerrar lo que no les sirve”, tuitearon como respuesta, desde la junta interna de ATE en la CNEA.
70 años de experiencia nuclear
A comienzos de año, el presupuesto de la CNEA fue prorrogado de 2023 para 2024 e implicó un “ahogo total y absoluto”.
“En la CNEA se ralentizaron casi hasta frenarse la construcción de los dos reactores que están en marcha, pero estamos viendo que no alcanza siquiera para pagar los servicios tercerizados que contrata el organismo —explicaba Carolina Komar, investigadora y delegada de la Junta Interna de ATE en el organismo en abril, en diálogo con Canal Abierto—. Hay problemas para pagar el servicio médico, la limpieza, el suministro eléctrico”.
Este ahogo presupuestario también paralizó el trabajo del Instituto Balseiro —organismo argentino de alto nivel, especializado en materia nuclear y espacial— y, como señaló Komar, el desarrollo del primer reactor nuclear nacional: el CAREM-25.
El CAREM es un prototipo de reactor pequeño, con capacidad de generar 32 megavatios, suficientes para abastecer a ciudades de hasta cien mil habitantes y es un desarrollo que se encuentra a la altura de otros similares elaborados por potencias nucleares como China, Rusia y Estados Unidos. En septiembre, el gobierno de Milei despidió 230 trabajadores que participaban de la construcción del reactor en Lima, lo que frenó la obra casi por completo.
“El congelamiento y licuación de nuestros salarios, los despidos en la obra, las renuncias y la pérdida de derechos laborales destruyen los más de 70 años de historia y experiencia en manos de los trabajadores”, explicaron desde la junta interna de ATE. De igual manera, se ralentizó la construcción del Reactor Argentino Multipropósito RA-10, en Ezeiza.
Las consecuencias
Como adenda, por primera vez desde los 90, el Consejo de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) perdió cerca de 600 investigadores, según detalló a este medio Sol Martínez, secretaria Gremial de ATE en el organismo.
También se ven comprometidos por el desfinanciamiento el funcionamiento de los organismos estatales Dioxitek, en Córdoba; la Planta industrial de Agua pesada (PIAP), en Neuquén; la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), en CABA; Nucleoeléctrica Argentina SA (NA-SA), en Provincia de Buenos Aires; la continuidad de la nueva Planta de Uranio, en Formosa; y la reactivación de la extracción de Uranio, en las minas de Sierra Pintada, Mendoza.
A raíz del discurso fake de Milei, y como consecuencia de esta política, este jueves la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) realizó múltiples protestas en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y una de las concentraciones fue en las puertas de la CNEA, en Av. Libertador 8250, donde desplegaron una bandera sobre la explanada con una consigna tan sintética como esclarecedora: “Milei culiadazo”.