“Milei piensa la diplomacia nacional como una proyección de su marca”
El especialista en política global Marco Teruggi analiza la nueva configuración mundial tras el triunfo de Trump. ¿Qué ocurrirá en Gaza y Ucrania? ¿Cuáles son las expectativas de Argentina? ¿Cuál es el rol de Milei en la internacional reaccionaria?
Redacción Canal Abierto | “Donald Trump es el gran aliado de Javier Milei en términos de pensamiento político, no así económico”, explica Marco Teruggi, sociólogo, corresponsal y analista de política internacional.
En un contexto mundial muy agitado, la vuelta de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos que se efectivizará el próximo 20 de enero configurará un nuevo escenario donde el primer mandatario argentino pretende jugar un rol protagónico.
“Trump y Milei comparten una serie de ideas fuerzas que son lo que unifica a la Internacional reaccionaria que, según cada país, se acentúa con su propio color local. En Europa está más asentado en el tema de los migrantes. En Estados Unidos, en la invasión de latinoamericanos. Pero de conjunto comparten una arremetida muy fuerte contra lo que no sean valores tradicionales, conservadores y todo aquello que entra en esa gran categoría de ‘socialismo’, ‘ideología de género’, ‘progresismo’, ‘globalismo’. Todo eso es una suerte de gran zona que es el enemigo común”, resume Teruggi en diálogo con Agenda propia.
En esa arremetida, el especialista considera que, en el plano político, Milei va a ser “uno de los principales aliados” de Trump en estas latitudes. Pero, económicamente, la política arancelaria que anuncia Trump “no parece que vaya a favorecer a ningún país de América Latina”, ya que el norteamericano ya ha anunciado que incrementará los aranceles de los productos extranjeros, y en un 100% a aquellos que provengan de países que formen parte de los BRICS. Entre ellos está Brasil, principal socio comercial de Argentina.
Pese a eso, el presidente argentino ha decidido “sobreactuar su alineamiento con Estados Unidos e intentar dinamitar todo tipo de integración continental”.
“Milei piensa casi siempre gran parte de su diplomacia con su propia proyección, como una suerte de cruzada de sus ideas y de su figura. Está proyectando su marca, se está intentando posicionar en un discurso que tiene aceptación en esta batalla de valores, culturales, civilizacional. Pero económicamente, si uno agarra la familia de esa internacional reaccionaria, del neoliberalismo exacerbado de Javier Milei hay muy poco o ninguno”, plantea Teruggi.
Una transición del centro de poder
Si bien el analista asegura que éste es “el momento más fuerte de Donald Trump”, quien tiene mayoría de votos y de legisladores en ambas Cámaras, eso está lejos de ser verdad para Estados Unidos en el plano internacional.
“Hay una transición del centro de poder —explica Teruggi—. Que no hay actores hegemónicos es un hecho y parte del debate en Estados Unidos es pensar cuál va a ser su papel hacia adelante. Esto es aceptado por las demócratas y los republicanos: la idea de los 90, de inicios del siglo XXI, de un Estados Unidos pudiendo hacer y deshacer se terminó”.
En ese escenario donde China no para de crecer y con ella el bloque de los BRICS hay, según el analista, un terreno para América Latina “en el cual poder desarrollar política con inteligencia”. Pero eso no es lo que está pasando.
“Uno ve más dificultad para pensar lo común, qué es lo que hoy unifica, en un momento aún más necesario”, sostiene.
En ese sentido, “China tiene un repertorio de inversiones y de acuerdo económicos importantes en diferentes áreas y un nivel de exigencia mucho menor al que tiene Estados Unidos, que tiene menos para ofrecer”. Pero la capacidad de pragmatismo de Milei, mientras sobreactúa su alineamiento incondicional con el gran país del norte, aún no está clara.
Ucrania y Gaza, en la etapa Trump
Si bien Trump ya ha anunciado, en el caso de Ucrania, que es necesario un avance en una negociación, “en qué tiempos, con qué actores y negociando qué exactamente, está por verse”, señala Teruggi.
“Pero que es una guerra que no puede ser ganada por Ucrania es lo que subyace en el diagnóstico. Y que el centro principal de conflicto no reside en Rusia sino en China, y que ese conflicto hay que cerrarlo”, sintetiza.
Luego advierte: “Rusia, contra todo lo que se ha dicho, ha logrado tres años de guerra sin quedarse sin municiones, sin que colapse su economía con el conjunto de sanciones, y eso ha fortalecido su alianza en los BRICS: China, India y las líneas de circuitos monetarios alternos a los que domina Estados Unidos. Es probable que Trump busque avanzar (en un acuerdo de paz). Pero creo que va a haber muchas resistencias, palos o misiles en las ruedas”.
En el caso de Medio Oriente, Teruggi recuerda que el antecedente de Trump “es de una agresividad similar o tal vez incluso mayor a la de la administración de los demócratas”.
“Es muy llamativo que el gobierno de (Joe) Biden y la candidatura de (Kamala) Harris no cambiaron en ningún momento su posición respecto a lo que está pasando (en Medio Oriente), aún a sabiendas de que eso les quitaba votos. El nivel de compromiso con la cruzada que está haciendo el gobierno israelí, que ha devastado la Franja de Gaza, que ha devastado Beirut, que está volviendo a reactivar los grupos armados terroristas en Siria, da cuenta de que hay una agenda de máxima”, afirma.
Luego arriesga: “No sé si Trump tiene algún tipo de idea de cerrar la guerra escalándola aún más y llevándola a su última consecuencia, que es el enfrentamiento con Irán o si hay una posibilidad de que eso se detenga antes. El enfrentamiento con Irán, que ya tuvo señales y misiles de preaviso, es la caja de Pandora final de Medio Oriente”.
Finalmente, enfatiza en relación a Gaza: “Lo que me impacta es el nivel de relativización o naturalización de lo que está pasando. De hipocresía. Creo que eso va a traer un costo a futuro altísimo. El mundo está viendo lo que está pasando, y está viendo la no reacción europea y occidental, que tanto habla de derechos humanos y respetos y democracias, ante una destrucción en vivo y en directo que no tiene parangón. No hay periodistas que puedan entrar, a los que estaban los han asesinado, y la gente manda imágenes como puede por redes sociales”.
Mirá la entrevista completa de Agenda propia*, un programa producido por Canal Abierto que aborda la coyuntura disputando el sentido de la agenda.
Con la participación del secretario general de la CTA Autónoma, Hugo “Cachorro” Godoy, y del economista y presidente de Unidad Popular, Claudio Lozano.
Con la conducción de Ariel Crespo y Gladys Stagno.
*Todos los martes a las 14.30, por Somos (Canal 7 de Flow).
Fuente: https://canalabierto.com.ar