Fue el mismo agresor quien alertó sobre lo ocurrido. Se dirigió por sus propios medios hasta la Clínica Figueroa Paredes, ubicada a cinco cuadras de la escena del crimen. Allí, el hombre solicitó ayuda por una urgencia en su domicilio; acompañado por agentes policiales, reveló el cuerpo de su madre, junto al hacha con manchas hemáticas, que fue secuestrada.

Los resultados de la autopsia revelaron que la mujer fue decapitada desde la nariz, en sentido descendente. Acorde al informe, el hijo desmayó a golpes a su madre y, acto seguido, la estranguló con sus propias manos. Luego, le propició, al menos, 50 hachazos.

Según testimonios de familiares de la víctima y el atacante, el hombre “es una persona agresiva”. Incluso, pocas horas antes del crimen, su madre había mantenido una conversación telefónica con su hija, hermana del agresor, a quien le advirtió que el hombre de 34 años había amenazado con agredirla con un hacha.

En la causa interviene el fiscal Claudio Fornaro de la UFI de Homicidios de La Matanza. El agresor fue detenido por el delito de “Homicidio agravado por el vínculo”; no obstante, fue trasladado al Hospital Posadas para una evaluación psiquiátrica. De acuerdo con el resultado, se determinará si el acusado comprendía la gravedad de sus actos.