SAD: la historia de la riña deportiva del 2024

Por: Emilia Sifre

Además de la consagración argentina en la Copa América, en 2024 el mundo deportivo estuvo marcado por las disputas judiciales entre las Asociación del Futbol Argentino (AFA) y el gobierno de Javier Milei, que iniciaron en los primeros días de gestión libertaria cuando el Presidente publicó una resolución para habilitar a los clubes a convertirse en Sociedades Anónimas Deportivas (SAD).

Lo cierto es que, en diciembre de 2023 Milei concedió en varios artículos plasmados del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023, nuevas normas que permitían a los clubes el ingreso de las SAD. Por caso, esta normativa establecía que la AFA, presidida por Claudio “Chiqui” Tapia, debía permitir la afiliación de un club que sea una Sociedad Anónima a cualquier torneo oficial de fútbol.

A lo largo de todo el año, tanto la AFA como la Justicia se pronunciaron en contra de la inclusión de los modelos de la SAD en el fútbol nacional. Mientras tanto, aprovechando los fracasos argentinos en la Copa Libertadores y el avance brasileño, donde si están presentes las Sociedades Anónimas, Milei siguió impulsando la llegada de este esquema con la ayuda del expresidente, Mauricio Macri.

Tal es así que, en la Legislatura bonaerense varios diputados del peronismo presentaron proyectos para bloquear el modelo de las SAD en la provincia de Buenos Aires. En tanto, en el Congreso de la Nación el bloque PRO, por orden de Macri, ingresó una iniciativa para garantizar por ley el ingreso de las Sociedades Anónimas al fútbol.

No obstante a principios de diciembre, la Cámara Federal de San Martin falló a favor de la AFA y declaró como nulo los artículos 335 y 345 establecidos por el DNU hasta que se dicte sentencia definitiva, lo que generó una derrota para el gobierno de Milei y para Macri, que quiere la vigencia de las SAD desde que era Presidente de Boca Juniors.

Los fundamentos de la suspensión, firmada por los jueces de la Cámara, se basan en que la normativa impulsada por Milei perjudica el funcionamiento autónomo que ejercen las asociaciones deportivas, que se destacan por ser asociaciones sin fines de lucro y no deben ser forzadas a aceptar afiliaciones de sociedades anónimas.

Sumado a este revés judicial, otro fracaso de Milei en la guerra por las SAD fue la reelección de Tapia como presidente de la AFA hasta el 2028, ya que no se presentó ninguna lista opositora. En esta línea, el responsable del fútbol argentino obtuvo el voto positivo de todos los representantes de los clubes que se encontraban en el predio de Ezeiza, salvo el de Rodrigo Escribano, vice 3° de Talleres de Córdoba, y del delegado del club Estudiantes de La Plata, que estuvo ausente.

En su discurso como presidente reelecto, Tapia no dudo en responderle a Milei, quien en las redes sociales había manifestado que la mayoría de los jugadores de la selección juegan en clubes de Europa que pertenecen a SAD. “Si fuera tan fácil formar jugadores, no formarían jugadores argentinos, formarían jugadores de ellos”, exclamó.

El debate de las Sociedades Anónimas en el futbol es un tema que excede a las autoridades de los clubes. El 60,2 % de las personas socias de algún club mostraron una postura en contra, según un informe realizado por “Táctica, laboratorio del deporte argentino”, mientras que el 60% de los miembros de los clubes de barrio rechazan a las SAD. El apoyo registrado en ese relevamiento, es solo del 39%.

La última novedad de esta guerra, pareciera ser un alto al fuego. Es que, con motivo del anuncio de que Argentina albergará un partido del Mundial 2030, Tapia se mostró en la sede de la CONMEBOL con la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. Allí en Paraguay, ambos se sacaron una foto sonriendo e incluso el titular de la AFA le regaló a la hermana del Presidente una camiseta con su nombre.

Qué dice el DNU de Milei sobre las SAD

El DNU 70/2023 dispuso de una modificación a la Ley de Deportes N°20.655 que incluyó como “sociedad civil deportiva” a todas “personas jurídicas constituidas como sociedades anónimas, que tienen como objeto social la práctica, desarrollo, sostenimiento, organización o representación del deporte y la actividad física”.

El artículo 345 del DNU estableció como cláusula transitoria, que todas las instituciones, asociaciones y federaciones deportivas dispongan de un año para modificar sus estatutos de modo que se les pueda garantizar el derecho de afiliación de cada sociedad civil que quiera introducirse como SAD.

Además, el DNU también estableció que no se podía impedir ni privarse  cualquier derecho a una “organización deportiva”,  lo que incluye el poder afiliarse a cualquier confederación, federación, asociación, liga o unión, con fundamento en su forma jurídica.