En comunicación con El1, el secretario general del sindicato La Fraternidad, Omar Maturano, analizó el conflicto y señaló que el Gobierno, en lugar de citarlos antes del paro previsto para el próximo martes 4, los convocó recién para el jueves 6 de junio.

“Esto viene desde el mes de diciembre. En noviembre, el gobierno que se retiró nos dijo que no podían firmar nada en diciembre, y que le dejaban la paritaria a cargo del Gobierno entrante. En febrero hicimos un paro, porque no nos reconocían la inflación. Después de la medida tuvimos un aumento que fue, en realidad, casi nada. Nos nos quisieron reconocer marzo, tampoco abril. En mayo, con la medida de protesta puesta, nos ofrecieron un dos por ciento de aumento en abril y un siete por ciento en mayo. Les dije que nos quedó marzo, que en abril la inflación fue del 8.8, y en mayo todavía no sabemos de cuánto es. Nos dijeron ‘lo vamos a pagar a fines de junio’. No hubo solución”, repasó Maturano.

“Hay que hacerle entrar en la cabeza a este Gobierno que no queremos aumento salarial. Queremos empatar la inflación. Eso es lo que pedimos”, remarcó el dirigente gremial.

“Nosotros les dijimos que íbamos a parar hoy. Cambiamos la metodología para no parar. Pero ellos ya saben que el próximo martes vamos a hacer el paro. Y nos citan para el día jueves. Nos están cargando, porque ellos nos tendrían que citar para el día lunes. Si nos citan mañana, el fin de semana, el lunes, iremos y conversaremos. No tenemos problemas en dialogar. Pero esto es lo mismo que digamos que vamos a parar el próximo martes, y nos citen el mes que viene”, se ofuscó Maturano.

“El trabajador ferroviario tiene su salario congelado desde hace cuatro meses atrás. No nos dieron prácticamente nada. No podemos aceptar esto. Si dicen que nosotros hacemos un ‘paro salvaje’, hay que decir también que en el Gobierno son crueles y que no garantizan todas las condiciones de seguridad para viajar”, planteó el secretario general de La Fraternidad.

Según Maturano, un conductor de trenes con diez años de antigüedad, actualmente gana “1.300.000” pesos mensuales. Y recuerda que los conductores de trenes deben afrontar en su foja de servicios, al retirarse, una importante cantidad de fallecidos en accidentes, arrollamientos, y que también asumen el riesgo de verse involucrados en causas judiciales cuando ocurren siniestros que muchas veces están vinculados a fallas de mantenimiento o seguridad. “Siempre el hilo se corta por lo más delgado, por los trabajadores”, lamenta.

Por último, descartó que el paro del martes próximo tenga connotaciones políticas. “Al gobierno de Alberto Fernández le hicimos cuatro paros”, recordó.