Una especia milenaria con efectos antioxidantes y antiinflamatorios podría competir con medicamentos
La cúrcuma, reconocida por su característico color dorado y su aroma distintivo, se perfila como una alternativa natural con propiedades terapéuticas comparables a ciertos fármacos. Más allá de su tradicional uso en la cocina, esta especia ha captado la atención de la ciencia por sus notables aportes a la salud. Procedente del rizoma de la planta Curcuma longa, originaria del suroeste de India y emparentada con el jengibre, esta especia es ampliamente utilizada en la gastronomía asiática y en la medicina ancestral. De acuerdo con el hospital Continental de Hyderabad (India), la cúrcuma ha ganado creciente popularidad por sus efectos terapéuticos, positivos en el organismo.
Respecto de sus propiedades más destacadas, el principal responsable de estos beneficios es la curcumina, el compuesto activo de la cúrcuma, que también le confiere su color intenso al curry. Investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) encontraron que el consumo diario de curcumina puede mejorar tanto la memoria como el estado de ánimo en personas mayores que presentan deterioro cognitivo leve.
Por su parte, la dietista Amber Sommer, de la Clínica Cleveland (EE.UU.), señaló que la cúrcuma puede ser útil para tratar afecciones crónicas en las que la inflamación daña los tejidos corporales. Además, diversos estudios han demostrado su eficacia para aliviar el dolor articular y la inflamación, especialmente en casos de osteoartritis.
La cúrcuma también actúa como un potente antioxidante, ayudando a neutralizar los radicales libres —moléculas reactivas que pueden causar daño celular—, lo que repercute en una mejora general de la salud.
Antiinflamatorio y antioxidante
Gracias a estas propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, se ha observado que su consumo regular podría disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Según Sommer, existe evidencia científica que sugiere que la curcumina también puede desempeñar un papel en la prevención de algunos tipos de cáncer, en particular aquellos que afectan al sistema digestivo.
Incremento de la serotonina y dopamina
Asimismo, este compuesto bioactivo podría incrementar los niveles de serotonina y dopamina —neurotransmisores esenciales en la regulación del estado de ánimo—, contribuyendo a mitigar los síntomas de la depresión.
En resumen, la cúrcuma no solo enriquece los platos con su sabor y color, sino que se posiciona como una aliada natural para el bienestar físico y mental, con un potencial terapéutico que ha comenzado a ser reconocido por la medicina moderna. (InfoGEI)Ac
Fuente: https://infogei.com
