UNLaM – MARTÍNEZ: UN RECTOR POCO CONFIABLE

Por Prof. Joaquín G. Puebla

“Tras los incidentes del miércoles pasado en la puerta del establecimiento, cuando se evitó una toma de las instalaciones, la Universidad de La Matanza volvió a funcionar este lunes casi con normalidad, pero sigue en estado de alerta por el enfrentamiento de rectores, sindicatos y estudiantes por el presupuesto educativo. Aquella tarde, tras la confirmación del veto presidencial a la Ley de Financiamiento, varias facultades fueron tomadas por centros de estudiantes y agrupaciones políticas.

La UNLAM se plegó a la protesta, pero no dejó ingresar a grupos alborotados ligados al kirchnerismo, la izquierda y al intendente Fernando Espinoza. Tras haber permanecido cerrada también el jueves, la universidad emitió un comunicado público en la noche del domingo en el que explicaba que no estaba de acuerdo con las políticas de Milei, pero le atribuía los incidentes de la noche anterior a un violento grupo de militantes con oscuros intereses partidarios, escoltado por legisladores, dirigentes sindicales y referentes políticos. Quisieron tomar la universidad por la fuerza. Golpearon a docentes, no docentes y estudiantes, señalaba el comunicado de prensa, reclamó la rectoría. Este comunicado fue acompañado, este lunes, por una denuncia penal en la Justicia Federal de Morón contra once funcionarios del gobierno de Espinoza, con quien el rector, Daniel Martínez, mantiene una antigua rivalidad” (https://unmedioenmoron.com.ar/politica-economia/sigue-el-estado-de-alerta-en-la-universidad-de-la-matanza-que-reabrio-y-denuncio-al-municipio/)

Daniel Martínez, Rector de la Universidad Nacional de La Matanza, se ha convertido en una persona muy poco confiable.

El pasado miércoles, luego que se supiera que el Congreso Nacional había refrendado el veto presidencial de Javier Milei por la Ley de Financiamiento Educativo, varias Universidades del país se autoconvocaron y tomaron las sedes de la casa de altos estudios. Entre ellas estaba la UNLaM que fue tomada por sus estudiantes, hecho reconocido por las autoridades en un comunicado de prensa que sostenía que “La UNLAM se plegó a la protesta, pero no dejó ingresar a grupos alborotados ligados al kirchnerismo, la izquierda y al intendente Fernando Espinoza” y agregaba que “que explicaba que no estaba de acuerdo con las políticas de Milei, pero le atribuía los incidentes de la noche anterior a un violento grupo de militantes con oscuros intereses partidarios, escoltado por legisladores, dirigentes sindicales y referentes políticos. Quisieron tomar la universidad por la fuerza. Golpearon a docentes, no docentes y estudiantes”. Finalmente informaba que “se realizó una denuncia penal en la Justicia Federal de Morón contra once funcionarios del gobierno de Espinoza”

Los políticos y funcionarios municipales y provinciales señalados en la denuncia penal presentada por Martínez, emitieron un comunicado explicando lo sucedido y repudiando la actitud del Rector de la UNLaM.

La mentira tiene patas cortas… es verdad que varios grupos de distintos signos políticos se acercaron a la sede universitaria para brindar su apoyo al alumnado que había tomado la misma.

Daniel Martínez no le gustó que sus estudiantes tomaran la facultad, porque podría “quedar mal” ante las autoridades nacionales, con las que mantiene una buena y fluida relación. Al respecto podemos señalar su amistad con el ex Gobernador, Daniel Scioli o con el Diputado Nacional, Dr. Alejandro Finocchiaro, ex Ministro de Educación durante el gobierno de Mauricio Macri y docente de la UNLaM quién votó a favor del veto presidencial; tampoco olvidemos que, según dichos del propio Martínez, el actual Presidente de la Nación, Javier Milei, fue docente de la UNLaM.

Ante la toma de la sede universitaria y al no poder sancionar al alumnado que encabezó la protesta no tuvo mejor idea que señalar y acusar de disturbios a quienes fueron a apoyar la protesta estudiantil.

A Daniel Martínez, en varias oportunidades, se lo nombró como posible “candidato a Intendente matancero para enfrentar a Fernando Espinoza, pero siempre reculó sin dar muchas explicaciones”, eso sí, “siempre está tratando de hacer trastabillar al Intendente matancero y, en más de una ocasión, sembró rumores muy escabrosos contra Espinoza” nos comentaba un trabajador de esa Casa de Altos Estudios y agregó que “A Martínez no le da el cuero para jugar en política y tiene varios muertos en el placard de su oficina. No es trigo limpio… él y sus decanos le meten la mano en el bolsillo a los profesores, entre otros negocios que hace en la UNLaM”

Nuestro medio publicó varias notas respecto a los movimientos serpenteantes de Martínez en la política matancera, la última nota al respecto es: EL RECTOR PIQUETERO (https://semanarioquintopoder.com/el-rector-piquetero/)

Para desviar la atención y quedar bien con sus amigos y protectores, no tuvo mejor idea que denunciar a funcionarios municipales y provinciales sobre el tenor de la protesta.

Hay una realidad innegable: NADIE MANDÓ A NADIE A TOMAR LA UNIVERSIDAD, FUERON A BRINDARLE SU SOLIDARIDAD A LOS ESTUDIANTES DE LA UNLaM.

“Este es un invento del Rector y lo hizo para quedar como víctima de Espinoza cuando, en realidad, a él le molestó que sus alumnos tomaran la sede universitaria” me explicaba uno de los testigos, in situ, de la denuncia que presentó Martínez y agregó que “Echarle la culpa a Espinoza es lavarse las manos y quedar bien con sus amigotes”

Daniel Martínez, como señale párrafos arriba, “tiene un par de muertos dentro del placard” (tener “un muerto en el ropero, en el armario o en el placard” es mantener un secreto que te afecta tanto que no podrías dejarlo saber, y también esconder o disimular un asunto deshonroso o vergonzoso que si se supiera haría que la gente cambiara radicalmente la imagen que tienen de ti); “en realidad son varios los muertos, pero solo voy a nombrar el tema de la sucesión, como Rector, de Daniel Martínez en caso de jubilación, renuncia, etc.” me comentó una persona muy allegada a la interna universitaria y me explicaba que “el elegido es nada más y nada menos que su hermano Alejandro Martínez, conocido dentro del ámbito universitario como el gordo mano larga, que ya tuvo denuncias por acoso, al igual que su hermano. En los últimos meses, le inventó una Secretaria a su hijo Nicolás Martínez, y nombró a su hija Valeria Martínez Secretaria Académica en Cs. Sociales, preparándola para que ocupe el lugar de la decana. En fin, todo queda entre la familia”

Fuente: https://semanarioquintopoder.com